Dios también está con nosotros cuando tenemos miedo y estamos confundidos - Frase destacada del devocional de adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "Listo o no, ¡ahí voy!", del 24/12/2021

Listo o no, ¡ahí voy!

Y mientras ellos se encontraban allí, se cumplió el tiempo de que ella diera a luz. 

Lucas 2:6

Cuando un bebé decide venir, viene, y es muy poco lo que se puede hacer para detenerlo. José debe haber estado frenético, tratando de encontrar un lugar donde su esposa pudiera dar a luz a su bebé. ¿Dónde habría suficiente espacio? ¿Quién los acogería? ¿Estaba limpio, era privado, había una partera cerca?

Lo más probable es que María estuviera más allá de esas preocupaciones. El dolor produce ese estado.

Las cosas estaban fuera de control. Excepto que, por supuesto, no lo estaban. Dios había planeado que Jesús naciera en Belén, y nada de esto lo sorprendió. Dios los estaba cuidando, no importaba lo aterradora que pudiera ser la situación. No estaban solos: Dios estaba con ellos.

Dios también está con nosotros cuando tenemos miedo y estamos confundidos. Aunque nosotros no lo sepamos, Él sabe lo que está haciendo. Él está cuidando de nosotros. Él nunca nos dejará ni nos abandonará. ¿Cómo podría abandonarnos, cuando él es Aquel que vino a salvarnos a través de un nacimiento tan impensado y aterrador como ese?

ORACIÓN: Querido Jesús, quédate conmigo y ayúdame cuando tenga miedo y no sepa lo que está pasando. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

¿Cómo fue tu nacimiento, tranquilo y planeado, o caótico?

¿Por qué crees que Dios eligió un nacimiento tan azaroso e incluso peligroso para Jesús?

Cuando naciste en la fe cristiana, ¿fue tranquilo y bien planeado, o fue (humanamente hablando) azaroso y arriesgado?

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También es fácil para nosotros pasar por alto lo que Dios está haciendo en nuestras vidas - Frase destacada del devocional de adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "Un tablero de ajedrez", del 23/12/2021.

Un tablero de ajedrez

Por esos días, Augusto César promulgó un edicto en el que ordenaba levantar un censo de todo el mundo […] por lo que todos debían ir a su propio pueblo para inscribirse. Como José era descendiente de David y vivía en Nazaret, que era una ciudad de Galilea, tuvo que ir a Belén, la ciudad de David, que estaba en Judea, para inscribirse junto con María, que estaba desposada con él y se hallaba encinta. 

Lucas 2:1, 3-5

Esto me recuerda a un tablero de ajedrez gigante: las personas se mueven a través del Imperio Romano por orden de un emperador al que nunca habían visto, pero con poder de cambiar sus vidas. ¿Quién de ellos se habría dado cuenta de que el emperador mismo era un peón, la herramienta de Dios para llevar a su Hijo para que naciera en Belén?

Augusto César no era la persona más importante de esa historia. Él vivió y murió sin darse cuenta de que había una nueva persona entre sus súbditos: Dios mismo, nacido en la familia humana. ¡Imagínate perderse eso!

También es fácil para nosotros pasar por alto lo que Dios está haciendo en nuestras vidas. Claro, Dios no siempre anuncia lo que hará. Pueden pasar años antes de que veamos la mano de Dios en las cosas que nos están sucediendo en este momento.

Entonces, ¿qué hacemos? Lo que hizo José: manejar las tareas cotidianas que Dios nos pone enfrente, incluso si es tan aburrido como un censo. Dios se encargará del panorama general. En cuanto a nosotros, nuestros ojos están puestos en Jesús, nuestro Salvador. Él es nuestro Pastor y nos llevará a donde Dios quiere que estemos. Después de todo, ¡él nos ama tanto como para vivir, morir, y resucitar por nosotros!

ORACIÓN: Señor, cuando no pueda ver lo que estás haciendo con mi vida, ayúdame a confiar en que tú me diriges. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

¿Sientes la necesidad de entender lo que sucede todo el tiempo?

¿Qué haces cuando tu vida no está como tú quisieras y no puedes saber lo que Dios está planeando?

Cuéntanos de una situación en la cual no pudiste ver la mano de Dios en acción hasta mucho tiempo después.

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Jesús nunca nos deja solos, no importa lo difícil que se pongan las cosas - Frase destacada del devocional de Adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "Una vida descarrilada para ser de bendición", del 22/12/2021.

Una vida descarrilada para ser de bendición

Cuando José despertó del sueño, hizo lo que el ángel del Señor le había mandado y recibió a su mujer, pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito. Y le puso por nombre JESÚS. 

Mateo 1:24-25

Piensa en cómo cambió la vida de José cuando se despertó. El día anterior había estado planeando una boda, después de la cual viviría con una esposa y sus hijos, tal vez en una casa pequeña, una carpintería, nietos, una vida tranquila y ordinaria hasta el día de su muerte. No suena para nada mal. Una vida pacífica y bendecida.

Pero ahora José es un hombre con una misión: cuidar del Hijo encarnado de Dios. Protegerlo a él y a su madre. Protegerlos de los chismes y la vergüenza pública. Satisfacer sus necesidades, incluso cuando el trabajo de parto comience lejos de casa. Burlar a un rey malvado. Encontrar una manera de apoyarlos en el lejano Egipto, viviendo como refugiados. Y luego, lentamente, con cuidado, en silencio, reinsertar a la familia en Galilea una vez más sin hacer ruido, sin atraer enemigos, y continuar criando al Mesías en un remanso olvidado del Imperio Romano. No pides mucho, ¿verdad, Dios?

Si pudiéramos preguntarle, dudo que José se hubiera quejado. Por difícil que fuera su nueva vida, obtuvo algo de valor incomparable: Jesús, el Hijo de Dios y su Salvador. Y eso es lo que nosotros también obtenemos cuando Dios nos reordena la vida. Puede ser difícil; puede implicar sufrimiento y pérdidas o frustraciones que nunca imaginamos. Pero, con todo eso, tenemos a Jesús. Jesús nunca nos deja solos, no importa lo difícil que se pongan las cosas. Él camina con nosotros y nos levanta cuando caemos. Y lo hace con manos llenas de cicatrices de clavos, manos que siempre nos recuerdan que nos ama tanto como para morir y resucitar por nosotros. Eso es suficiente.

ORACIÓN: Señor, cuando reorganices mi vida, ayúdame a confiar en ti. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

¿Cuándo ha reorganizado Dios tu vida de una manera que no esperabas?

¿Cuál fue tu reacción emocional al cambio?

¿Cómo te ha ayudado Dios a lidiar con esos cambios?

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José es un hombre justo y también misericordioso. Deja tiempo entre la noticia y la decisión - Frase destacada del devocional de adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "Misericordia"

Misericordia

María, la madre de Jesús, estaba comprometida con José, pero antes de unirse como esposos se encontró que ella había concebido del Espíritu Santo. José, su marido, era un hombre justo y quiso dejarla secretamente, pues no quería denigrarla. Mientras José reflexionaba al respecto, un ángel del Señor se le apareció en sueños. 

Mateo 1:18b-20a

José está sorprendido por la noticia de que su prometida está embarazada de otra persona. Entonces, ¿qué hace? Al parecer, se va a su casa, se acuesta en su cama y piensa. Al menos, eso es lo que podemos deducir del hecho que luego se duerme y ve a un ángel que le dice la verdad sobre María y la gloriosa noticia sobre Jesús.

Pero ¿cuántos hombres en su posición se hubieran enfurecido y gritado, dejando que todo el vecindario supiera la situación? ¿Cuántos habrían tomado una decisión rápida en ese mismo momento, para dolor de todos?

Sin embargo, José no es así. Él piensa y ora. Se toma el tiempo para considerar, no solo su propio futuro, sino el de María. José es un hombre justo y también misericordioso. Deja tiempo entre la noticia y la decisión. Y durante ese tiempo, Dios lo alcanza. José me recuerda a Dios Padre.

Porque Dios también tuvo malas noticias una vez y tuvo que considerar qué hacer al respecto. Sus amados seres humanos se habían rebelado contra él, habían escuchado al diablo, se habían quebrantado a sí mismos junto con su mundo. Y Dios respondió con misericordia. Envió a Jesús para que fuera uno de nosotros, un ser humano. Vivió con nosotros, nos sirvió y cuidó, y dio su vida por nosotros. A través de su muerte y resurrección, él nos devolvió a Dios el Padre, ya no rebeldes, sino ahora hijos amados.

ORACIÓN: Amado Señor, gracias por ser paciente y misericordioso con nosotros, porque nos amas. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

¿Reaccionas de inmediato o te tomas tu tiempo para tomar una decisión?

Cuando estás preocupado y confundido, ¿dónde buscas ayuda?

¿Por qué crees que Dios permitió que José luchara con esta noticia antes de decirle la verdad?

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Dios envió a Juan al mundo para hacer felices a Elisabet y Zacarías, pero no solo a ellos - Frase destacada del Devocional de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "Muchos se alegrarán", del 20/12/2021.

Muchos se alegrarán

Cuando se cumplió el tiempo, Elisabet dio a luz un hijo. Y cuando sus vecinos y parientes supieron que Dios le había mostrado su gran misericordia, se alegraron con ella. Al octavo día fueron para circuncidar al niño, y querían ponerle el nombre de su padre, Zacarías. Pero su madre dijo: “No, va a llamarse Juan”. Le preguntaron: “¿Por qué? ¡No hay nadie en tu familia que se llame así!”. Luego le preguntaron a su padre, por señas, qué nombre quería ponerle. Zacarías pidió una tablilla y escribió: “Su nombre es Juan”. Y todos se quedaron asombrados. En ese mismo instante, a Zacarías se le destrabó la lengua y comenzó a hablar y a bendecir a Dios. 

Lucas 1:57-64

¿Has notado que Zacarías no recupera la voz una vez que nace su hijo? Parece extraño. ¿Por qué Dios lo haría esperar más?

Veamos nuevamente lo que dice la promesa: “Tu esposa Elisabet te dará un hijo, y tú le pondrás por nombre Juan. Tendrás gozo y alegría, y muchos se regocijarán de su nacimiento […] ahora vas a quedarte mudo, y no podrás hablar hasta el día en que esto suceda” (Lucas 1:13b-14, 20b).

Entonces, nació un hijo, sí, y los padres se alegraron, sí. Pero “estas cosas” no se cumplieron por completo hasta que la comunidad se regocijó y el bebé se llamó oficialmente Juan (que significa “el Señor es misericordioso”).

Dios envió a Juan al mundo para hacer felices a Elisabet y Zacarías, pero no solo a ellos. Juan prepararía el camino para Jesús, nuestro Salvador, y eso hizo de Juan un regalo maravilloso y muy esperado para las muchas, muchas personas que estaban esperando que Dios las salvara. Jesús nunca estaba lejos de donde estaba Juan. ¡No es de extrañar que Zacarías (y muchos otros) alzaran la voz para celebrar!

ORACIÓN: Gracias, Señor, por enviar a Juan y luego a Jesús, nuestro maravilloso Salvador. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

Cuando eras niño, ¿qué esperabas con mucho anhelo?

¿Cuánta ansiedad te crea esperar por algo que deseas desesperadamente?

¿Crees que Zacarías se lamentó de su tiempo de silencio? ¿Por qué?

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…Somos total y felizmente dependientes de Jesús - Frase destacada del devocional de Adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "La gentileza de otros", del 19/12/2021.

La gentileza de otros

María se quedó con Elisabet como tres meses, y después volvió a su casa. 

Lucas 1:56

Me pregunto si fue difícil para Elisabet depender tanto de María. Tres meses de buscar y transportar agua, de barrer y limpiar, porque es casi seguro que las tareas más difíciles recayeron sobre María. Elisabet estaba en los últimos tres meses y probablemente tenía sesenta años o más.

Me pregunto si fue difícil para María depender tanto de Elisabet. Después de todo, aunque eran parientes, Elisabet no era ni su madre ni su hermana. María pasó tres meses bajo su techo comiendo, pidiendo y recibiendo su consejo.

Para quien ha sido educado para ser independiente, puede ser difícil depender de la amabilidad de los demás, incluso de las personas cercanas, como amigos o familiares. Sin embargo, esta es la forma en que Dios quiere que vivamos. Como parte del cuerpo de Cristo somos interdependientes, nos demos cuenta o no. ¡No sería mala idea que nos acostumbráramos!

Quizás esta sea parte de la razón por la que Jesús vino a este mundo como un bebé diminuto, totalmente dependiente de su madre para obtener leche, calor y la vida misma. Dependiente de José para protección y provisión. Dependiente de la comunidad en general para muchas cosas: el refugio en el que nació, los caminos que recorrieron sus padres, la seguridad que encontró en Egipto como niño refugiado. Jesús sabe lo que significa ser dependiente.

Nosotros también sabemos lo que significa ser dependiente, porque somos total y felizmente dependientes de Jesús. Él es nuestro Salvador que murió para hacernos hijos de Dios. Él es nuestro Señor que resucitó de entre los muertos para darnos la vida eterna. Quizás, si hemos aprendido a depender de él directamente, también podemos aprender a depender de él, con su ayuda, a través de su pueblo.

ORACIÓN: Señor, cuando tenga problemas para aceptar ayuda, ¡ayúdame! Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

¿Qué te resulta más fácil, dar ayuda o aceptarla?

¿Por qué crees que es así?

Comparte sobre un momento en que Dios te bendijo con la ayuda de otra persona.

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Es bueno que recordemos esos momentos de alegría. La oscuridad volverá pronto - Frase destacada del devocional de Adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "Cantando de alegría", del 18/12/2021.

Cantando de alegría

Entonces María dijo: “Mi alma glorifica al Señor, y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador. Pues se ha dignado mirar a su humilde sierva. Y desde ahora me llamarán dichosa por todas las generaciones. Grandes cosas ha hecho en mí el Poderoso; ¡Santo es su nombre! 

Lucas 1:46-49

Después de un viaje largo y difícil, María finalmente se iba a encontrar cara a cara con la única persona en el mundo con la que podía contar que iba a creerle: su prima Elisabet. Y luego se enteró de que el Espíritu Santo ya le había traído la noticia; todas las explicaciones ya estaban hechas. ¿Qué podía hacer María sino cantar de alegría?

Hay momentos en los que Dios nos bendice tanto, que nuestro corazón se desborda de alegría. Como María, queremos cantar. Algunos cantamos, tengamos buena voz o no. Otros encontramos diferentes formas de expresar nuestro amor y felicidad: a través de la oración, a través de la acción, hablando con compañeros cristianos que comprenderán exactamente lo maravilloso que Dios ha sido con nosotros.

Es bueno que recordemos esos momentos de alegría. La oscuridad volverá pronto. Mientras cantaba, María todavía recordaba que Dios usaría a su Hijo para esparcir a los orgullosos y derribar a los poderosos. ¿Se dio plenamente cuenta de que Jesús haría esto

a través de su muerte en la cruz? Tal vez no. O tal vez sí, si había entendido las profecías del Antiguo Testamento, en cuyo caso podría haber entendido también sobre la resurrección.

Pero para esos días oscuros María todavía tendría esto para recordar: el día en que tuvo la primera oportunidad de compartir sus buenas nuevas en toda su plenitud con alguien más atrapada en la misma bendición. Nosotros también tenemos eso: nuestro Bautismo, la Confirmación, momentos de Comunión, momentos especiales con nuestros hermanos cristianos. Gracias a Dios por esos momentos.

ORACIÓN: Señor, cuando esté angustiado, consuélame con el recordatorio de tus bendiciones y fortaléceme para esperar en ti. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

Nombra uno de los días más felices de tu vida.

¿Qué lo hizo tan maravilloso?

Cuando estás preocupado, ¿qué bendiciones de Dios recuerdas?

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Es muy fácil deprimirse por las cosas que no podemos hacer, pero el Espíritu Santo nos ayuda en nuestra debilidad - Frase destacada del devocional de Adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "Respondiéndole a Jesús", del viernes 17/12/2021

Respondiéndole a Jesús

Por esos mismos días, María fue de prisa a una ciudad de Judá que estaba en las montañas. Al entrar en la casa de Zacarías, saludó a Elisabet. Y sucedió que, al oír Elisabet el saludo de María, la criatura saltó en su vientre y Elisabet recibió la plenitud del Espíritu Santo. Entonces ella exclamó a voz en cuello: “¡Bendita eres tú entre las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre! ¿Cómo pudo sucederme que la madre de mi Señor venga a visitarme? ¡Tan pronto como escuché tu saludo, la criatura saltó de alegría en mi vientre!”.

Lucas 1:39-44

Todavía le faltan tres meses para nacer, y de repente, a través del Espíritu Santo, Juan se da cuenta de que está en la presencia de Jesús, su Salvador. Aún no puede caminar, ni hablar, ni siquiera ha nacido. Todo lo que puede hacer es saltar de alegría, ¡y eso es exactamente lo que hace!

Un bebé en el vientre está bastante limitado en lo que puede hacer para recibir a su Salvador. Nosotros también podemos estar limitados físicamente o de otras formas. Por ejemplo, yo no puedo arrodillarme para tomar la comunión. Mi discapacidad me lo impide. Un amigo mío no tiene automóvil y no puede llegar fácilmente a la iglesia. Otros viven entre no cristianos, lo que les dificulta adorar o reunirse con otros creyentes.

Es muy fácil deprimirse por las cosas que no podemos hacer, pero el Espíritu Santo nos ayuda en nuestra debilidad. Él es quien le hizo saber al bebé Juan que Jesús estaba cerca, en el vientre de su madre. Él es quien creó la fe en ti, llevándote a conocer a Jesús, quien murió y resucitó por ti. Podemos confiar en que Dios el Espíritu Santo nos ayudará a seguir respondiendo con amor y gozo a Jesús nuestro Salvador, sin importar cuán limitadas se vuelvan nuestras circunstancias.

ORACIÓN: Querido Señor, muéstrame cómo amar y recibir a mi Salvador. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

¿En qué forma específica has respondido al amor de Jesús esta semana?

¿Cuándo te has sentido indefenso y dependiente?

¿Cómo has visto al Señor obrando en ti, incluso en esos momentos?

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Nadie es demasiado insignificante para él - Frase destacada del devocional de Adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "La promesa cumplida", del jueves 16/12/2021

La promesa cumplida

Y la Palabra se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos su gloria (la gloria que corresponde al unigénito del Padre), llena de gracia y de verdad […] Ciertamente de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. La ley fue dada por medio de Moisés, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie lo vio jamás; quien lo ha dado a conocer es el Hijo unigénito, que está en el seno del Padre. 

Juan 1:14, 16-18

Después de tantos, tantos años, sucedió. Ocurrió en silencio, oculto dentro del cuerpo de una joven. Dios se convirtió en un ser humano, el más diminuto de los humanos, deslizándose silenciosamente en la historia de la humanidad sin fanfarrias ni reflectores. Pasarían nueve meses antes de que alguien viera su rostro.

María sería la primera en conocerlo. ¿Era activo o callado, bullicioso o tranquilo? ¿Pateó mucho? ¿Le gustaba el movimiento o el canto? ¿Cómo era Jesús antes de nacer?

María no nos dejó ningún registro. Pero hubo mucha gente que nos dijo cómo era Jesús después de su nacimiento y cómo es incluso hoy. “Lleno de gracia y de verdad”, dice Juan. “La gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo”.

¿Qué clase de persona es él? Es una persona llena de gracia. Es bondadoso y misericordioso, ama a quienes no son amados y da la bienvenida a quienes no son bienvenidos. Aunque es puro y santo, lo vemos dando la bienvenida a personas de mala reputación. Los niños pequeños se acercan a él. Los leprosos y los extranjeros reciben su atención y ayuda. Nadie es demasiado insignificante para él.

Él es la gracia que camina, habla y respira. Él es la gracia que muere y resucita. Él es Jesús, la imagen del Dios invisible, nuestro Salvador.

ORACIÓN: Querido Señor, gracias por tratarme con amor y gracia. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

¿Qué piensas cuando escuchas la palabra “misericordioso”?

Cuenta alguna ocasión en que alguien te mostró gracia, aunque no la merecías.

Comparte sobre un momento específico en el que Dios te mostró su gracia.

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Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo está con nosotros para siempre - Frase destacada del devocional de Adviento de Cristo Para Todas Las Naciones CPTLN Chile "¿Y ahora qué", del miércoles 15/12/2021.

¿Y ahora qué?

Y el ángel se fue de su presencia. 

Lucas 1:38b

El ángel se fue y ahora María tiene que afrontar el resto de su vida. ¡Qué interesante! ¡Qué abrumador! Nada volvería a ser igual. Espero y confío en que Dios le haya dado unos minutos a solas para acostumbrarse. No pudo haber sido fácil.

Los momentos como este también nos llegan, a veces momentos de alegría, a veces no. “Estás embarazada”, me dijeron, y yo estaba muy feliz. “Es cáncer”, dijeron, y nos llenamos de tristeza y temor.

¿Quién puede hacer frente a estos cambios? Cuando el ángel se va y nos quedamos para afrontar las cosas solos, ¿quién puede ayudarnos? Solo el Señor mismo.

El ángel Gabriel dejó a María, pero el Señor no. Dios se quedó con ella apoyándola y ayudándola a adaptarse a las noticias más extrañas y bendecidas de la historia. En algún momento, tal vez incluso ahí mismo, el Espíritu Santo estaba haciendo su obra, trayendo nueva vida a su vientre. Jesús mismo estaría con ella durante nueve meses, tan cerca como siempre lo está un ser humano de otro, desde una sola célula hasta un bebé a término, moviéndose, pataleando y viviendo.

El Señor tampoco nos abandona a nosotros. Cuando Dios nos hizo suyos, el Espíritu Santo vino a vivir en nosotros para siempre. Él es nuestro ayudador y consolador. Jesús mismo nos ha prometido: “Yo estaré con ustedes todos los días” (Mateo 28: 20b). También nos ha dicho que nadie puede arrebatarnos de las manos del Padre (ver Juan 10: 29).

Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo está con nosotros para siempre. No nos dejará solos para afrontar los cambios de nuestra vida, incluso los más difíciles. El mismo Dios que vino a salvarnos, a morir y a resucitar por nosotros no nos abandonará ahora. Él se quedará con nosotros y nos ayudará para siempre.

ORACIÓN: Querido Señor, quédate conmigo y ayúdame con los cambios en mi vida. Amén.

Dra. Kari Vo

Para reflexionar:

En general, ¿te gustan los cambios? ¿Por qué sí o por qué no?

¿Qué cambios estás enfrentando ahora mismo?

Cuenta de un momento en que Dios te ayudó a superar un cambio importante.

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